La declaración de la renta 2020-2021, que comenzó hace una semana en España, se ha convertido en excusa para que grupos de ciberdelincuentes lancen ataques dirigidos. Recientemente, el Instituto Nacional de Ciberseguridad (Incibe) alertó sobre una campaña de correos maliciosos en la que los criminales suplantan a la Agencia Tributaria. El objetivo, como en tantos otros casos, es engañar a la víctima para que instale en sus equipos un virus de tipo troyano capaz de recopilar datos personales y bancarios. Es decir, un ataque de tipo ‘phishing’ de manual en el que, además, se utiliza código malicioso donde persiguen robar los datos personales y bancarios a la víctima.
«Este año, los intentos de ataque con ‘phishing’ y ‘malware’ (virus informático) han aumentado exponencialmente ste fraude, advirtiendo a los usuarios para que no cayeran en la trampa, pese a ello el número de víctimas de este tipo de ataques sigue siendo importante.
Estos correos contienen un gancho para hacer picar a los destinatarios: fingir un error en los datos que debe solventarse, ofrecer una deducción extra si se registran en un determinado formulario o la devolución inmediata de una cierta cantidad, incluso avisos de posibles sanciones si no se siguen las instrucciones que nos dan. Cualquier excusa para conseguir que se haga clic en enlace contenido en el propio correo.
Si el usuario finalmente pincha en el enlace, le conduce a una página web con una apariencia muy similar a la auténtica de la Agencia Tributaria, cuyo objetivo es engañarle para rellenar sus datos. En esta página falsa se encontrarán un formulario, aparentemente legítimo donde se solicitan datos personales, bancarios y de la tarjeta de crédito.
